Nuestro nuevo estilo de vida, más sedentario, sumado a la ansiedad, favorece el sobrepeso y la obesidad. Factores que afectan negativamente a las articulaciones.

Nuestro aparato locomotor está formado por: huesos, articulaciones, músculos, tendones, ligamentos... Que están todos coordinados para que estemos rectos y activos.

Cuando nos duele la rodilla, el codo, la muñeca… suele ser porque el cartílago que está entre los dos huesos (como una almohadilla), no tiene ese espesor que debe tener y hace que nuestros huesos friccionen y como consecuencia, duelan.

Antes de hablar del dolor articular, hablaremos del dolor en general que se define como una experiencia sensorial y emocional desagradable asociada a una lesión tisular real o potencial, o descrita en términos de dicho daño. Es una experiencia subjetiva de gran complejidad, en la que actúan muchos factores biológicos, psicológicos y sociales. Pero el dolor es generalmente secundario a una causa física evidente, conocida o no….

El dolor articular puede referirse a un dolor agudo o crónico, dependiendo de su causa o localización. Esta causado por distintos tipos de enfermedades o lesiones, como artritis, artrosis, bursitis, gota, condromalacias ,infecciones víricas, tendinitis…

El desgaste del cartílago articular en un individuo con actividad física moderada empieza aproximadamente a los 35 años, se puede producir antes si se tiene una actividad física intensa o de alta competición. A partir de los 60 años de edad prácticamente todos nos vemos afectados por sus síntomas.